Cuidados en cautividad
La tortuga griega, es una tortuga resistente, que se adapta muy bien a climas templados y secos, la mejor opción es un recinto exterior, siempre que se pueda, en caso de disponer de una época del año con temperaturas entre 20º y 35º de media diaria, con unos mínimos nocturnos superiores a 10º, se pueden mantener en el exterior durante esta época y luego trasladarlas a terrarios interiores.
Alimentación:
La dieta debe incluir la mayor variedad de plantas, hojas y flores posible, debe ser rica en fibra, y baja en proteínas e hidratos de carbono.
Entre la hierbas de fácil acceso se encuentran el diente de león, llantén, malva, achicoria, hibisco, berros, rúcula, trébol, hojas verdes de lechuga romana , endibia, escarola, cactus opuntia sin espinas, calabaza..
El tomate se les debe dar solo ocasionalmente pues posee mucho acido oxálico.
También es conveniente una vez a la semana piensos especiales para tortugas herbívoras,
Las frutas (melón, fresas, manzana, etc.) se deben ofrecer solamente como alimento muy ocasional, la fruta con mucho contenido en agua y azúcar les suele producir diarrea,
Los alimentos se deben espolvorear con un suplemento vitamínico varias veces por semana, con una relación de entre calcio y fósforo de no mas de 2 a 1, especialmente para los animales juveniles o hembras gestantes.
El complemento de calcio debe contener vitamina D3 para las tortugas mantenidas en interior, y sin vitamina D3 para los que viven al aire libre, dado que la vitamina D3, la sintentizan ellas favorecida por su exposición al sol.